viernes, 15 de julio de 2011

Sin nada que decir


   Una tormenta de invierno me levantó, mientras descansaba en mi cama, aunque no conseguía dormir, me gustaba pensar. Los pensamientos brotaron de mi interior y expulsaron lágrimas de tristeza. Me levante lentamente me coloque mis zapatillas
Y despacio y sigilosamente abrí la persiana. Sentí el suelo frió y veía como las gotas chocaban contra el cristal dejándolo empañado. La lluvia disminuyo su fuerza, y caía ligeramente. Abrí la ventana, al ver como las calles estaban húmedas y sentir el olor al asfalto mojado, hizo que mis sentidos se alertasen. Mi piel se erizo, temblaba, mi olfato moqueaba, mi boca se quedo sin apenas saliva.
   L e recordaba con ternura y amor mientras veía los charcos sentí la necesidad de abrazarle, a veces siento como me abraza con sus blanquecinas y cálidas manos como me roza suavemente y se deslizan por mi espalda dejándome relajada y a la vez tan nerviosa. Pero todo eso era simplemente mi subconsciente, nunca volvería a estar conmigo jamás volvería a escuchar su risa picara y contagiosa, ya nunca podría  reposar mi cabeza en su pecho y sentir los latidos de su corazón. El jamás volvería aunque era lo que más deseábamos los dos, se fue para siempre y ya nunca podría encontrar el camino de vuelta, a lo mejor lo encuentro yo, pero sería un camino muy largo e importante, porque no podría dar marcha atrás. He pensado un trillón de veces si de verdad quiero intentar encontrarle aunque no tengo la certeza de dar con el simplemente tengo fe y sé que nuestro amor es tan fuerte que me da igual las barreras que tenga que cruzar con tal de lograr mi propósito.
   Abrí la puerta, con el cuerpo pesado fui hacia el patio, me quite la bata que cubría mi cuerpo pálido, me quite los pantalones y me quede en ropa interior con una camiseta de tiras. Antes de salir al patio escribí una nota para quien la leyese, para quien le importase:
   -No pretendo hacerle daño a nadie, intento buscar mi felicidad que la perdí cuando injustamente el dejo de existir, cuando el se convirtió simplemente en un recuerdo en un ser esquelético y muerto. Intentare buscarle.
   PD: Lo siento.
   Mis manos seguras y firmes agarraron el pomo de la puerta. Cuando Salí la lluvia recobro intensidad. Sentí frió, mucho frió, pero quería sentir que vivía y impulsiva mente descalza bajo la lluvia empecé a bailar, en mi cabeza sonaba una tenue melodía, nuestra canción, era música clásica, danzaba como si fuese la más feliz, sentía que él estaba junto a mi bailando.
   Me metí varias pastillas en la boca, sentada empapada de las frágiles gotas que rozaban mi piel y recorrían mi cuerpo sin pudor con descaro. Mientras esperaba a que las pastillas inciensen efecto recordé aquellos tan bellos recuerdos que tenía de él, cuantos recuerdos me venían a mi cabeza, 14 años  juntos, el era mi vida, el era mi mundo. Mi corazón latía sin parar a mil dos mil latidos por minuto, recordé  sus labios, finos rozando mi boca, compartiendo saliva, intercambiando amor.
   Sentía calor a pesar de tener mis labios morados y secos a pesar de titiritar sentía calor no podía evitar sentirme así, ya que cada vez que pienso en el, mi organismo se comporta de una forma extraña y para normal.
   Mis fuerzas disminuían al igual que la lluvia mis ojos se empezaron a cerrar. Sonreí, no sonreía hace 9 meses desde que el fue asesinado todo por un simple atraco, todo por dinero. Cayó una lagrima de mis ojos que recorrió mi cara, pero no era solamente de tristeza y miedo, era también de amor y felicidad, porque le sentía junto a mí, cerca, arropándome con sus brazos para que no pasase frió.
   -¿Edward? ¿Eres tú?
   Lo veía, veía su tierna cara, estaba tan cerca, el último suspiro que di, la ultima palabra que pronuncie fue te amo.

viernes, 15 de abril de 2011

¿Qué es la vida?

La gente se empeña es pensar que vivimos por una razón ¿Y si yo no tengo una razón de existencia? ¿Y si fui un error de la naturaleza? También se empeñan en que una persona en concreto es tu vida entera pensado que durara todo la vida, sintiendo un sentimiento al que llaman amor y ese "amor" ¿Quiere decir que estoy muerta? para algunas personas obsesas con esa idea sí. Yo no lo creo. Pienso que la vida no es simplemente amar a una persona, se pueden amar otras muchas cosas; animales, seres que no sabemos que existen.
Todavía es pronto para poder decir que amo a alguien o algo. Por eso desvió este tema y hablare sobre que es mi vida que supone para mi esto.
Nunca me he considerado inteligente, ni graciosa, ni guapa, soy muy espontanea hago las cosas sin pensarlo tres veces, creo que es lo mejor, porque si se piensa mucho empezamos a desvariar y a sacar conclusiones  que no son las mejores, y total la vida solo se vive una vez, es mejor aprovecharla antes que intentar hacerlo todo correcto y perfecto, porque jamás podremos crear algo sumamente perfecto. Mi vida gira en torno a la fantasía la imaginación la creación. Me gusta crear pequeños relatos donde
Puedo expresar mis sentimientos y emociones y a lo mejor con suerte puedo hacer que alguien se dé por aludido o aludida.
Soy soñadora y creo que las personas como yo estamos en peligro de extinción, cada vez hay menos personas adictas a la magia, a la locura… Pero a pesar de todo esto, me siento la mayor parte del tiempo sola, sin saber que hago en este mundo donde no veo que encaje.
Creo que la razón principal por la que escribo es para evadirme de la realidad que me rodea. En mis historias todo es perfecto el sol es de color fucsia, las palmeras amarillas y las personas son amables, cariñosas, te dan cosas sin pedir nada a cambio. Lo que me gusta de mis mundos inacabables de fantasía es que las  personas no son falsas se dicen lo que piensan sin preocuparse en perjuicios, ironías, maldad.
Aunque suene raro lo que voy a decir, es algo que me hace sentir bien. Cuando necesito cariño y nadie me lo da, dibujo una, muñeca ahorcada, harta de vivir y opta por huir, esa muñeca para mi refleja un acto de cobardía y a la vez paz.
Pero si la pregunta es ¿Qué es la vida? No puedo contestar, no se a veces como se llama mi hermano. Tengo muchas preguntas, como todo el mundo, pero creo que esas pequeñas cosas y ala ves grandes preguntas, son las que le dan un emoción a mi día a día porque nunca sé lo que me espera el mañana, a lo mejor me levanto y me doy cuenta de por qué existo o a lo mejor mañana me levanto y no vuelva a respirar o puede que mañana se acabe el mundo no sé lo que pasara, solo sé que no soy nadie para dar falsas teorías sobre la vida. Puedo contar un millón de historias, puedo escribir los infinitos de defectos que tengo, pero nunca podre explicar-¿Qué es la vida?


sábado, 9 de abril de 2011

Biografía de una muerta

He pasado por tantos estados  en mi vida, pero sin dudarlo creo que morirme fue lo mejor. Una vez muerta no sientes nada, no tienes ni frió ni calor, no tienes que fingir lo que no eres, no hace falta sonreír para caer bien a la gente. Ya que cuando te mueres, te encuentras, solo con una tenue luz que no para de parpadear y solo estas tu y tus recuerdos. Al principio la idea de estar sola me atusaba, pero me di cuenta que era  lo mejor que jamas me a ocurrido. No necesito darle explicaciones a nadie. Ahora todo esta en silencio y solo escucho gritos, risas fingidas, gente enfada, todo fruto de mis recuerdo.
Ya no puedo escuchar los latidos de mi corazón , ni mi respiración. Si alguien me pudiese tocar se enfriaría con solo rozarme soy tan fría como el hielo, no siento pena, bueno en realidad en mi mente siento rechazo, una tristeza capaz de inundar todo Japón. He sido marginada por la sociedad, que aun siento como me humillan, como se burlan de mi, ¿ porque ? no lo se creo que lo hicieron por  el simple hecho de que no era simpática, decía lo que pensaba, y lo que pensaba acerca de la gente no eran cosas buenas, eran cosas terribles, malsonantes y maleducadas. Tuve en vida una gran educación fui a los mejores colegios del mundo me enseñaron a ser una señorita, si no hubiese dejado de existir estaría dando clases en princeton. Me enseñaron a comportarme como una persona refinada e culta. Todo tenía que ser correcto, no podía cometer fallos. Hasta que rechace la nobleza, la simpatía y la educación. Deje de lado mis conocimientos que fui aprendiendo a lo largo de mi vida. Mis notas en ningún momento bajaron del sobresaliente, por los que mis padres no se podían quejar, aunque supongo que no se enteraron de mis notas hasta el día en el que deje de existir.
En vida no pedía mucho solo quería tener una casa humilde donde hubiese una cama, una familia que me esperase para desayunar un gran patio con muchos árboles para que me diesen  sobra en una tarde soleada de primavera mientras disfrutaba de una amena lectura.
Sin duda lo que mas echare de menos de estar viva sera el sol, sentir como los rayos penetran en mi cuerpo y me llenan de vida y vitaminas.
Ahora estoy en paz, no me puedo quejar, estoy haciendo lo que toda la vida desee, que es no existir.